Inmidiotez: la inmediatez de los idiotas

Inmidiotez significa, como ya indica el título, la inmediatez de los idiotas. Me refiero a toda esa gente que vive, o más bien cree vivir, en un mundo inmediato, es decir no mediado y sin vuelta de hoja, rápido y ágil, fresco y espontáneo, como ellos mismos, cuando en realidad no lo es tanto ni tan guai.

Ciertas cosas resultan obvias, pronunciado o declamado, ¡Es obvio!, de una manera que parece que están llamando idiota al interlocutor. Que si no le busquemos cinco patas al gato, como decía un extranjero, con más lógica que tres.

De hecho idiota se desvía de su significado original. idios siginificaba peculiar, separado (piénsese en idiosincrasia, idioma, ideología), e idiotes: persona privada, sin concimientos técnicos, ignorante.

De modo que la inmidiotez mezcla la inmediatez con una obsesión no reconocida con la normalidad, con que todo el mundo siga un esquema, o uno de varios esquemas ahora que se admiten varias orientaciones sexuales. Quiero decir que dentro de cada orientación sexual uno se restringe a hacer tres cosas: poesía, sexo e hijos. Nada más.

Técnicamente el inmidiota funciona ajeno a la idea de proceso y complejidad. Al contrario, piensa que todo es simple e inmediato.

Sospecho que la inmidiotez tiene mucho que ver con cierto nihilismo. Nada sirve de nada. He aquí una lista no exhaustiva de cosas que un inmidiota considera inútiles:

• aprender idiomas extranjeros: porque no se hablan aquí (inmediato), de lo contrario no serían extranjeros
• estudiar una carrera técnica, en lugar de Derecho o Empresariales
• leer: requiere un esfuerzo y no está recompensado económica- es decir inmediatamente
• coser a máquina: sale más barato comprarlo chino

No me refiero a un nihilismo extremo y grotesco, sino a uno subliminar. Uno reduce todo a lo práctico.

Tal vez contribuya a aclarar el fenómeno pensar que (los inmidiotas) dividen la vida en ocio y negocio...

A menudo me he encontrado manteniendo conversaciones con la misma estructura fundamental. Determinada acción o aspecto de la cultura se cuestiona sin misericordia. Por ejemplo leer sobre inteligencia artificial. Siempre que tal lectura o estudio nos reporte placer el inmidiota la respetará y dejará en paz. Pero ante cualquier insinuación de que esa o actividades análogas nos puedan enriquecer, abrir horizontes, sugerir posibilidades de acción, acercarnos a la cultura de ciencias etc. chocará con su fiera y tenaz oposición. Nos lanzará una sucinta y penetrante estocada: ¿Sirve para algo? Quiero decir, ¿Sirve para algo INMEDIATA Y TANGIBLEMENTE?