Domesticación: Amoldar la Naturaleza
Me crucé hoy con el propietario de un caniche. Conocía a este cachorro, que intentaba jugar con el mío de once años. Llevaba una especie de collar. Me explicó que lo acababan de castrar y se arrancaba los puntos si no lo llevaba. Por lo demás este amo mostraba mucho cariño por su perro.
Me pregunto que opinaría de la operación el animalito.
Me pregunto que opinaría su amo si le hubisen castrado para, por ejemplo, trabajar en un harén o que su voz no perdiera agudos.
De modo que degradamos a los animales y a la vez los humanizamos, gastamos en ello dinero y tiempo que salvarían a otros seres que sí son humanos.
Seleccionamos lobos hasta conseguir razas dóciles pero tontas. Y luego, en nuestra actual fase civilizatoria, vamos y los castramos, a los perros, a los lobos los matamos a tiros o de hambre.
Por una parte alguien va y mutila a un animal al que quiere. Conozco los argumentos a favor de esta intervención, como que le alarga la vida y que es necesaria para que personas y perros puedan convivir. Etc.
Lo que no consigo entender es cómo podemos mostrar tantísima consideración, aunque castradora, con un animal en particular y que no nos preocupe que nuestro modo de vida ocasiona muchísimo dolor a otros animales que no vemos. ¿Acaso no sería la actitud coherente y consecuente practicar el veganismo?
En esencia, cometemos una serie de aberraciones que no se le ocurrirían a un animal:
- castrar a diestro y siniestro: perros, gatos, caballos, cerdos
- crear por selección razas alejadas de las naturales
- encerrar/encarcelar a dichos animales en granjas industriales, pisos de ciudad, jaulas etc.
- gastar cantidades desmesuradas de dinero y tiempo en animales de compañía y caballos de recreo
- destruir el hábitat de los animales silvestres