Consumo/desigualdad aceptable o solidaria

Un consumo aceptable es un consumo supuestamente ejercido por un rico que, sin ser necesariamente igual al del resto de los ciudadanos, no ocasiona merma de su calidad de vida.

Algunas características que se siguen del principio de no perjudicialidad son:

Algunos ejemplos de consumo que, pese a estar por encima de la media en calidad y cantidad, se consideran aceptables son: