Se consideran monoteísmos principalmente el cristianismo, el islamismo y el judaísmo. También en la Antigüedad Clásica había una tendencia a creer en un solo Dios. No es que no haya ahora ni haya habido otros monoteísmos en este planeta, pero el resto no destaca tanto.
Tanto el cristianismo como el islamismo se construyen sobre la base del judaísmo, pero a la vez son religiones independientes del judaísmo. El cristianismo y el islamismo reconocen que el pueblo judío ocupa un lugar destacado dentro de la humanidad dado que Dios lo eligió para revelársele a él primero.
Esto, desde el punto de vista de los monoteísmos, constituye un hecho histórico. Son religiones históricas: la Revelación ocurre en un momento determinado de la Historia, y los profetas y Cristo fueron personas con nombres y apellidos
, a diferencia de los fundadores de otras religiones, cuya personalidad se pierde en la leyenda.
Esto se explica porque los monoteísmos creen en la verdad objetiva. En la esfera de lo literario en los monoteísmos se produce una disociación de la forma y el contenido. Este significado se condensa en escrituras, las cuales contienen unos significados que son absolutamente y objetivamente verdaderos.
Curiosamente, las tres sienten un fuerte apego por la
metafísica.
Si se la quitásemos sus afirmaciones quedarían reducidas a la Nada, lo cuál les horroriza porque aún no saben que la Nada se escribe con mayúscula.