El proceso de escribir

Antiguamente el escritor se sentaba ante el papel o cualquier otro medio anterior (papiro, pergamino, tableta de arcilla) y se ponía a escribir. Después vino la máquina de escribir. Lo que escribía, en cuanto estaba estaba satisfecho de ello, lo llevaba a un editor, que tal vez le aplicara una somera corrección de estilo, gramatical, ortográfica, y luego llevaba el resultado a un impresor.

Por supuesto, antes de Gutenberg ni siquiera había impresor, como mucho copista o amanuense...

Hoy en día el escritor encargará a un mecanógrafo que "le pase a ordenador" su manuscrito, si es que no lo escribe él directamente a ordenador, y lo entregará a un editor o/y a conocidos para que le apliquen la susodicha somera corrección. Por último lo entregará a un impresor y negociará las condiciones.

A su vez el impresor procesará el archivo que recibe del editor y creará otro que podrá imprimirse directamente en sus máquinas tan caras como industriales sean.